segunda-feira, 27 de fevereiro de 2012


sabel Coixet diseña un bebé gigante para el pabellón español de Shanghai



RITA ÁLVAREZ TUDELA / PEKÍN
Miguelín respira, parpadea, sonríe y sueña durante los próximos seis meses con las ciudades que legamos a las nuevas generaciones gracias a un sistema de animación en la sala “Hijos”, que completa el recorrido del visitante por el pabellón español.

En este bebé, la Sociedad Estatal para Exposiciones Internacionales (SEEI) pretende encarnar las propuestas para mejorar las ciudades, como el reciclaje y las energías limpias, los nuevos medios de transporte, la solidaridad, la igualdad o la educación.

La madre de la criatura es Isabel Coixet, quien ve en la cultura china y la española la pasión compartida por los niños. “Aquí los bebés les alucinan, les fascinan todavía más que en España. Es un símbolo universal y a todo el mundo teóricamente le gustan los bebés, pero aquí con la política del hijo único, hay una glorificación y respeto todavía más grande”, dijo Coixet.

“Hemos dado muchas vueltas hasta llegar a esto. He investigado con asesores, amigos y artistas chinos que conozco”, precisó Coixet, para sentenciar que los chinos “se pelearán por hacerse la foto con Miguelín”.

Nenhum comentário:

Postar um comentário